Zúrich es una hermosa ciudad suiza cuyos primeros asentamientos se remontan al siglo I a.C. En la actualidad es una de las urbes más bonitas de Centroeuropa y ofrece a sus visitantes incontables atractivos turísticos para visitar y disfrutar. Podrás conocer de primera mano tanto el pasado como el brillante presente de la ciudad. El viaje merecerá la pena, sin duda.
Atrás quedaron los días en los que Zurich estaba visto como una ciudad aburrida, llena de bancos y no mucho más. Hoy en día este vibrante lugar es un hervidero de energía e incluso alberga la fiesta callejera más grande de Europa.
Te recomendamos que comiences tu visita por Banhoff Strasse, una calle comercial en la cual podrás palpar el día a día de la ciudad y de sus vecinos. Puedes pasear tranquilamente, admirando sus bonitos edificios hasta Parade Platz, donde te maravillará la preciosa iglesia de Fraumünster, que si bien no es tan grande en tamaño como una catedral, sí que es un templo imponente y encantador gracias a su arquitectura estilizada con su gran torre campanario.
Otra visita que no te puedes perder, es la casa donde estuvo viviendo Lenin antes de iniciar su revolución ideológica en Rusia. Y por la tarde o noche puedes tomar alguno de los múltiples tranvías y desplazarte admirando la ciudad hasta el bohemio Café Metropol y, más tarde, hasta el Cabaret Voltaire, donde nació el movimiento artístico del Dadaísmo.
Asegúrate de pasear por las calles adoquinadas del casco antiguo que se extiende a ambos lados del río Limmat. El Museo de Bellas Artes, definitivamente vale la pena visitar, con muchos maestros modernos que incluyen a Giacometti, Rodin y Van Gogh. La iglesia Fraumunster del siglo XII tiene vidrieras de colores muy distintivos mientras que el Grossmunster en el otro lado del río, tiene dos torres.
Y, si quieres más información de todo lo que Zurich puede ofrecerte, visita la web oficial de la oficina de Turismo de Zurich.